Mi monstruo
Mi monstruo ya no vive debajo de mi cama. De los seis a los diez años soñaba que salía cada noche para asustarme y comerme. Pero ya no vive debajo de mi cama.
Mi monstruo se ha mudado. Ahora vive en mi cabeza desde que salió de mis sueños para dejar de verme como una niña y convertirme en su lolita.
Mi vida ya no es mía. Mi cuerpo ya no es mío. Todo pertenece a mi monstruo desde que tenía 10 años. Pero nadie lo ve. Al igual que nadie ve a mi monstruo, el resto solo ve a mi tío.
Sc