Ver mi reflejo
Me miro…
Aun no cicatrizo la herida que me hizo en el abdomen con la hoja de la navaja que siempre lleva encima, probó de mí fue la sangre que corría sobre mí.
Estamos tumbados sobre una mullida manta extendida en el suelo. Él decide que quiere jugar y su mano acaricia todo mi cuerpo con delicadeza, va desatando de los botones de mi camisa y acaricia mi pequeña cicatriz con su nariz. Él está dentro de mí y yo no estoy preparada. Mis ojos le suplican que no lo haga porque mi voz está quebrada. Una sonrisa se dibuja en su boca y decide comenzar una marcha que yo no quiero que empiece.
Unos tortazos y un puñetazo son suficiente para que mi labio comience a sangrar me pide perdón me besa en los labios y se despide de mi con ternura.
letras con belleza