Lágrimas de cristal

Nunca dejé de soñar con volver a sonreír sin tener que esforzarme. No era habitual el día que no hubiese ningún golpe. Lloraba con los ojos rojos, cansada del dolor. La sangre que ya derramé estaba guardada en mis recuerdos. Corría en los pasillos de mis miedos y podía ver una luz; pero el tiempo para alcanzarla se acababa de inmediato. Solía leer mis brazos, llenos de tormentos, que dolían con solo suspirar. Me sentaba enfrente de la realidad y lloraba hasta el cansancio que se repetía cada noche. Los minutos eran segundos, eran siglos…
Supe desde el primer golpe que sería mi último día de vida. Solo deseaba despertarme de esta pesadilla pero ya era tan tarde que subí al cielo con alas de plumas y lágrimas de cristal.

Nube☁️