El poder del rebaño

“Vivíamos juntas, en nuestro rebaño. Un día, vimos al lobo. Nos pusimos nerviosas y nos dispersamos. Una de nuestras hermanas apareció herida.
Nos enfadamos tanto que desarrollamos la estrategia de permanecer siempre unidas y nunca salirnos del grupo. Así nuestro rebaño tendría poder para impedir que nos hiciera daño a ninguna”

Nuestra psicóloga de terapia de grupo nos contó esta historia para que sintiéramos que no estábamos solas. Yo jamás me sentí sola.
Lo que ella no sabía era que mi rebaño, antes de que “el lobo” pudiera acabar con mi vida, fue mi propia hija, que llamó a la policía para denunciar a su padre…
El poder del rebaño es fundamental, sobre todo si tu rebaño lleva tu propia sangre.

Vío