Asunción, una torta sin miel

La asunción
Afilada y peligrosa
Con miedos helados
Que se hunden en el fango
Con caricias y miradas rotas
Recubiertas de enigmas sin respuesta
Con partes y daños que humedecen el alma
Y podan la sensibilidad
Esa, soy yo,
La agrietada e incurable violencia de género.
Una torta sin miel
Sacó a flote mi ahogo y mi miedo
Mi despertar ofuscado y tenebroso
La vista borrosa y helada
El crujido de una llave oxidada y descolorida
Un rezo con adiós anticipado
Una ducha helada de prejuicios
Así me apellidan
La “medicicada” sin cura
Violencia de género.

LIRIO